
Cuando se habla de disrupción laboral, el término suena bastante dramático. Como si algo fuera a impedir que las personas hagan su trabajo o accedan a empleo. En algunos casos esto podría ser cierto, pero el problema más grande relacionado con la disrupción en el momento actual es cómo las organizaciones abordan la estructuración de los acuerdos laborales. En términos sencillos: cómo se realiza la contratación de empleos y cómo son los esquemas contractuales.
Este mes, nuestros equipos en Gi Group Holding organizaron un evento llamado Flex the Mould para discutir este tema. Y a través de este artículo, quiero llevar la discusión un paso más allá, enfocándome en lo que significa “blended” (mezclado/fluid) para las empresas en distintos países de América Latina y en qué punto se encuentran estas organizaciones respecto al aprovechamiento de modelos laborales blended o fluidos.
Adopción: cómo se ve el modelo blended/fluid en LATAM
Curiosamente, los mercados latinoamericanos parecen estar alineados con estructuras laborales más flexibles y ágiles. De hecho, fuentes como SIA y el conglomerado inmobiliario Jones Lang LaSalle destacan a la región como una de las de mayor adopción de esquemas de trabajo híbrido (72 % de las empresas en toda la región, 86 % en Brasil). Además, en lo que respecta a trabajadores contingentes y canales de staffing, la región sigue mostrando un crecimiento significativo. Los datos disponibles indican una valoración del mercado de staffing de 11.500 millones de USD para fines de 2023 y un crecimiento sostenido en 2024, con empresas que cada vez más utilizan mano de obra temporal/agencias junto con esquemas MSP/RPO. También hay un crecimiento interesante en la contratación freelance y en la provisión de talento remoto/gig para equipos de trabajo. Por ejemplo, los ingresos de plataformas freelance alcanzaron los 523 millones de USD en 2023, con México como el mercado de mayor crecimiento, mientras que datos de la OIT muestran que decenas de millones de trabajadores en la región están actualmente empleados a través de plataformas digitales. En resumen: los fundamentos para el crecimiento de modelos laborales blended en la región ya están presentes.
¿Qué motiva los esquemas blended?
La respuesta simple es la volatilidad del mercado y el control de costos. Los equipos blended permiten a los empleadores ajustar la fuerza laboral a los ciclos de demanda y a los vaivenes macroeconómicos (divisas, crecimiento, elecciones/cambios políticos) sin comprometer costos fijos. Según datos de la Confederación Mundial del Empleo, la actividad de staffing en Sudamérica ha sido relativamente sólida incluso cuando otras regiones se desaceleraron. Además de la imprevisibilidad y las preocupaciones sobre lo desconocido del mercado, las empresas de alto crecimiento también ven los modelos blended como una vía rápida para escalar (por ejemplo, en nearshoring, e-commerce, fintech). Es decir, compañías que están ampliando operaciones logísticas/tecnológicas (como la expansión de contrataciones de MercadoLibre en 2024) dependen del talento híbrido y contingente para crecer rápidamente en distintos países. También hay una alta demanda de modelos blended entre empresas que enfrentan barreras para acceder a talento y capacitación. La apertura de la región a altos niveles de adopción de equipos híbridos y remotos permite el reclutamiento transfronterizo/remoto; las plataformas y agencias amplían el acceso a habilidades en tecnología, CX y operaciones cuando los mercados laborales formales locales están ajustados o cuando hay una excesiva dependencia de esquemas informales.
¿Qué beneficios respaldan la viabilidad a largo plazo de los modelos blended?
La preocupación por el tiempo es lo que hace que los modelos blended sean más atractivos para las empresas. Ya sea que operen en industrias en crecimiento o en escalamientos ambiciosos, los modelos blended han demostrado garantizar tiempos de contratación más rápidos y capacidad de respuesta ante picos de demanda. Diversos socios y herramientas de sourcing de talento – agencias, MSP/RPO y plataformas – ofrecen canales listos para conformar equipos rápidamente. Esto ha sido especialmente visible en expansiones regionales de logística/tecnología y en contrataciones estacionales. Además, los modelos blended también favorecen una mayor productividad y continuidad gracias a diseños de trabajo flexibles. Con el modelo híbrido ya establecido como norma, los empleadores combinan roles presenciales, remotos, contratados y permanentes para mantener operaciones y retener talento en distintos mercados. En muchos casos, los candidatos ven esta agilidad estructural como un requisito indispensable al evaluar posibles empleadores. Quieren estructuras laborales que se alineen con el mundo moderno y flexible del trabajo. Finalmente, los modelos blended también están resultando útiles para resolver algunos de los desafíos (o dolores de crecimiento) en las estructuras laborales regionales, en lo que respecta a dispersión de riesgos y opciones de cumplimiento. El uso de canales contingentes y programas gestionados puede ayudar a navegar la mezcla a veces desigual entre trabajo formal/informal y las regulaciones cambiantes, mientras se prueban roles antes de convertirlos en permanentes.
En esencia, nuestro futuro laboral blended es una respuesta lógica a un mercado laboral global definido por la incertidumbre y la disrupción. Así que quizás, para tu empresa – en América Latina o en cualquier parte del mundo – valga la pena explorar los beneficios del modelo blended. Combinaciones inteligentes de sourcing interno de talento y reclutamiento, junto con el apoyo de agencias y servicios de staffing, parecen ser la mejor apuesta para atravesar la tormenta de disrupción en talento, habilidades y regulaciones que definirá los mercados laborales globales en el futuro cercano.
        





